La vida expresada en un juego
El rugby es un deporte para todos, de diferentes contexturas físicas, para todas las edades y géneros. De su naturaleza, es inclusivo. Se juega de 15 jugadores por lado con diferentes posiciones y roles, una cancha delimitada con zonas de Try y la tan característica H. El balón es ovalado, impredecible su movimiento y a la vez dirigido con una precisión única en su traslado por los jugadores. El objetivo es llevarlo a la zona de puntos, evadiendo la defensa y sus tackles. Es paradójico que se avance con pases hacia atrás por medio de las manos y patadas. Requiere estrategias, variadas destrezas y habilidades, las cuales se diferencian por las posiciones de cada jugador. El ataque y su táctica para sobreponerse al rival, requiere tener los ojos abiertos, tomar decisiones en milésimas de segundo, estar los 15 conectados y concentrados entre sí. Hasta que llega la disputa, dada por un tackle. Se arman las líneas de offside, el equipo defensor puede recuperar el balón jugando siempre de pie y lícitamente. Y aquí va denuevo, por medio del Ruck, es un inicio de un nuevo ataque buscado los espacios libres, corriendo, visualizando y comunicándose. Las formaciones fijas y reinicios, son propios del rugby, ningún otro deporte tiene algo que se asemeje. El Scrum es un conjunto de 16 jugadores divididos en 2, por defensa y ataque. El equipo no infractor tiene el derecho de obtener ventaja sobre la disputa; cuclillas, tomarse, ¡ya!, son las palabras del referee que dan comienzo a una de las cosas más lindas del juego. El Line Out, es una formación para reiniciar el juego, una vez que el balón sale de la cancha. Los jugadores lo disputan en las alturas, con torres conformadas de tres jugadores, 2 levantadores y el saltador. Cuando comienza el partido, y reinicio del segundo tiempo, el equipo portador del balón, el cual se da por un sorteo entre capitanes, sale de Dropkick al medio de la cancha. Los principios del Rugby son característicos, y teniéndolos claros, se domina el juego. Estos están en transición constantemente, comenzando con la posesión del balón, avanzar, presión, apoyo y continuidad, que finalmente en ataque su objetivo es marcar puntos. Los mismos principios son para la defensa, tema que será abordado en otra oportunidad.
Cómo tal, el Rugby es más que un deporte, es un estilo de vida, una escuela para ser una persona llena de valores intrínsecos a las bases de la sociedad. Es crear amistades para toda la vida, enseña a ser resilientes, con coraje y pasión, ser disciplinados, respetuosos con nosotros mismos y el resto, desarrolla la verdad, el compromiso y la responsabilidad, si un integrante cae, se levanta junto con el apoyo de un club completo, jamás estará solo. El club es la segunda familia, con una cultura propia, genera sentido de pertenencia e identidad. Sus colores están presentes en la vida diaria, y cabe mencionar que todos apuntan a las mismas creencias y prácticas, con base de la humildad, el amor a la camiseta, con un respeto único a las reglas que protegen al juego, resguardado por el árbitro. El crecer participando en un entorno de rugby, abre un camino a conectar la felicidad, cuando las primeras experiencias del juego, como tacklear, marcar un try, o alentar al club, difícil es olvidar, dado que todo lo que entrega, en algún momento de la vida, como jugador o padre de hijos o hijas rugbistas, las puertas de club estarán abiertas siempre para disfrutar del juego y celebrar la vida entre 2 haches.